Fecha: 12 de julio de 2013 19:31
CAPULÍ, VALLEJO Y SU TIERRAConstrucción y forja de la utopía andina2013 AÑOEVANGELIO VALLEJO DE LA SOLIDARIDADY UNIVERSALIDAD DEL MUNDO ANDINOJULIO, MES DEL MAESTRO;DEL SANTUARIO HISTÓRICODE MACHU PICCHU; BATALLADE HUAMACHUCO, LEONCIOPRADO; Y FIESTAS PATRIAS*****IMÁGENES DE LA INAUGURACIÓNDEL XIV CAPULÍEN LA CASA DE LA LITERATURA PEUANAHACER CLIC AQUÍ*****PRÓXIMAS ACTIVIDADESDE CAPULÍ, VALLEJO Y SU TIERRAAULA CAPULÍSÁBADO 13 DE JULIO, 7 PM.EL HONORDE SERSOLDADOSEN CONMEMORACIÓNDE LA BATALLA DE HUAMACHUCOMARCAVALLE, PUCARÁ Y CONCEPCIÓNPROGRAMA1. PALABRAS DE BIENVENIDA Y PRESENTACIÓNA CARGO DE DANILO SÁNCHEZ LIHÓNPRESIDENTE DE CAPULÍ, VALLEJO Y SU TIERRA2. RAMÓN NORIEGA: EL ESPÍRITU MONTONERODE LOS DEFENSORES DEL PERÚ ETERNO3. ÁUREO SOTELO: MI VIDA DE SOLDADOCOMO SARGENTO HERRADOR DE CABALLERÍADURANTE DOCE AÑOS EN EL EJÉRCITO DEL PERÚ4. WALTER VÁSQUEZ VEJARANO, EXPRESIDENTEDE LA CORTE SUPREMA DE LA REPÚBLICA:TRADICIÓN DE MILICIA Y HEROÍSMO EN EL PERÚ5. DISTINCIÓN A SOLDADOS DE LA PATRIA6. CANTO, POESÍA, MÚSICA Y PROCLAMASTRIBUNA LIBRECONDUCCIÓN GENERALMANUEL RUIZ PAREDESSÁBADO 13 DE JULIO, 7 PM.CENTRO CULTURAL ROALHUASIRAMÓN DAGÑINO 265, ALTURACUADRA 6 AV. AREQUIPACERCA AL CENTRO CULTURALDE ESPAÑA. LIMA, PERÚ.INGRESO LIBRESE AGRADECE SU GENTIL ASISTENCIA*****PRESENTACIÓNDEL LIBROCÉSAR VALLEJOPOETA UNIVERSALDEMARA L GARCÍA, PHD.BRIGHAM YOUNG UNIVERSITYEDICIÓN DE LA UNIVERSIDADNACIONAL MAYOR DE SAN MARCOSPANELDE PRESENTACIÓN:MARCO MARTOSDANILO SÁNCHEZ LIHÓNACTUACIÓN ARTÍSTICA:RICARDO ELÍASCONDUCCIÓN:ELID BRINDISMIÉRCOLES 24 DE JULIO, 4 PM.18 FERIA INTERNACIONAL DEL LIBRODE LIMA. AUDITORIO CIRO ALEGRÍAPARQUE DE LOS PRÓCERESAV. SALAVERRY, CUADRA 17. JESÚS MARÍAFRENTE AL CÍRCULO MILITARINVITACIÓN Y DOCUMENTASOBRE EL LIBROHAGA CLIC AQUÍ*****PRESENTACIÓNDEL LIBRO DE POESÍAEL HOMBREY SU ÁNGELDEDANILO SÁNCHEZ LIHÓNPANELDE PRESENTACIÓN:RAMÓN NORIEGAEMILIO SÁNCHEZ LIHÓNJULIO YOVERACONDUCCIÓN GENERALMANUEL RUIZ PAREDESSÁBADO 17 DE AGOSTO5 PM.CASA DE LA LITERATURAPERUANA. ANTIGUA ESTACIÓNDESAMPARADOS7 PM.AULA CAPULÍEN EL RESTAURANTEEL CORDANO*****PARTICIPACIÓNDE CAPULÍ, VALLEJO Y SU TIERRACOMO JURADO CALIFICADORJUEGOS FLORALES ESCOLARES NACIONALES"UN PAÍS DE TODAS LAS ARTES"CONCURSO REGIONAL DE DECLAMACIÓNCON LA PARTICIPACIÓN DE NIÑOS Y JÓVENESREPRESENTANTES DE 45 UGELES DE LA REGIÓN"LA LIBERTAD" EN SANTIAGO DE CHUCOTEATRO MUNICIPAL TÚPAC AMARUDE SANTIAGO DE CHUCO,LUNES 19 DE AGOSTO, 2013SE SELECCIONARÁN A LOS REPRESENTANTESQUE COMPETIRÁN EN LA ETAPA FINAL NACIONALGERENCIA REGIONAL DE EDUCACIÓN,UGEL SANTIAGO DE CHUCO*****PÁGINA WEBHACER CLIC AQUÍ:*****Teléfonos Capulí:420-3343 y 420-386099773-9575*****13 DE JULIOESTAMPADEL MESDE JULIOFOLIOSDE LAUTOPÍAYA ESTÁAQUÍLA FIESTADanilo Sánchez Lihón"Entre inciensos, cirios y cantares".César Vallejo"Al pasar me miró sonrientey una estrella dejóme aquí dentro…Todo obra del Apóstol bueno."Federico García Lorca1. Leerel edictoLa fiesta del mes de julio en mi tierra empieza cuando "La par y non", que así llamamos a la banda de músicos de mi pueblo, rechina por sobre los techos desgajando sus sones gemebundos y salimos a ver qué es lo que sucede y de qué se trata.Ahí está el pobre agrupamiento, que en estas ocasiones se engrandece pese a que la decimos ya sin lugar a las apelaciones: "La Par y non". Porque en la visión desalmada de la gente solo ven o cuentan a tres: uno que toca el bombo, otro que se engolosina con el clarinete y el tercero que resopla en una trompeta estridente y abollada. Pero en verdad no siempre son solo tres, sino que además lo engalana una tarola y un contrabajo empedernido.– ¡Bando público! ¡Bando público! –grita el tío Gilmer Vallejo, rojo por el cañazo que toma desde la madrugada. Y cesadas las notas de la banda empieza a leer el edicto:– ¡El Cabildo Municipal encomienda al vecindario de Santiago de Chuco el pintado de sus fachadas por estar próximas las Fiestas Patronales dedicadas a nuestro Patrón bendito, el Apóstol Santiago el Mayor...!2. SeguirvivosEn una y otra esquina repite lo mismo y nosotros lo seguimos como su cohorte o agrupamiento.– ¡El Cabildo Municipal encomienda al vecindario de Santiago de Chuco…!Pero el papel que lee y dobla en cuatro, y que al principio lucía limpio, íntegro y atildado poco a poco se ha ido rasgando con el temblor de sus manos al punto que los niños tenemos que sostenerlo por partes delante de su rostro para que lea con sus ojos enrojecidos.Aunque de tanto repetirlo ya lo sabe él de memoria y solo mira los retazos que le mostramos para darle contundencia y majestad de ley al edicto decisivo:Entonces la exclamación en el interior de las casas es:– ¡Ya llegó la fiesta!– ¡Ya está en camino el Apóstol bendito!Y la gente coge la punta de su rebozo o de su saco o poncho y se enjuga unas lágrimas de emoción y sentimiento de seguir vivos gracias a la misericordia de nuestro Apóstol bendito.3. Oímosel griteríoPero en realidad la fiesta se anuncia antes. Y es cuando resuenan a retazos las cornetas de los escolares quienes fuera de hora ensayan para el desfile tocando en los bosques de Santa Mónica o cerca al estadio de fútbol.El sonido viene traspasando calles, corrales y muros de adobe. Llega enredado en las copas de los árboles. Y después cayendo, hechos pedazos de clarín por toda la comarca.Notificación que en la casa nos hace apurar la confección de uniformes y el cocido del sutache en las insignias.Como el bordado de ojales en los escarpines para los que tocamos en la Banda de Guerra de la escuela.Es mitad del mes de julio cuando se produce en el alma nuestra un estremecimiento, como si cogiéramos una cuerda muy tensa por la cual pasa un temblor, de chiquillo en chiquillo.Que es cuando oímos el griterío:4. Lleganlos gitanos– ¡Los gitanos! ¡Vienen los gitanos!Y todo nuestro ser se sacude y sobresalta. Es cuando una tarde un tropel de niños corre tras un camión destartalado.Es de colores vivos pero desteñidos que entra al pueblo dando bufidos y arrojando bocanadas de humo que nos llena de borrones el cielo azulino.– ¡Los gitanos! ¡Están llegando los gitanos! ¡Son los gitanos que llegan!, –es el bullicio de los chicuelos.Eso basta para que las madres se griten de puerta en puerta y de ventana en ventana:– ¡Escondan a sus hijos! ¡Ya vinieron los gitanos!– ¿Y por qué tienen que escondernos encerrándonos y no dejándonos salir de las casas, abuela?5. El espectáculode vivir– Porque los gitanos roban a los niños, los embalan en unos fardos, lo introducen en unos barriles y los llevan ocultos en unas cajas hasta dejarlas en la costa. Y de allí los embarcan por el puerto de Salaverry rumbo a los países más desconocidos.– Y, ¿para qué?– Para sacarles sus ojos en el extranjero y vender el sebito de sus cuerpos a los gringos, de donde extraen un aceite y una grasa muy fina.– Y, ¿para qué?– La utilizan para untar en lo más delicado que tienen sus máquinas y sus fábricas que sin esa pomadita hecha de la grasilla de los se atascan y ya no funcionan.Pero aun así, hay niños sin padres ni abue¬las aburridas que los molesten, y que todo el día están sentados al frente del terreno descampado que queda al pie del mercado de abastos.Y viéndoles a los gitanos nada más que en el espectáculo de vivir y de cómo desarrollan sus tareas cotidianas:6. Haciaun muroY ven cómo fuman un cigarrillo que lo chupan desde el gitano más alto hasta el gitano más chiquitito.De cómo hablan con acentos guturales una jerigonza extraña.De cómo las faldas floreadas de las mujeres las arrastran sin importarles que se mojen en los charcos que ha dejado la lluvia.Clavan al centro del solar un mástil que elevan y de donde cuelgan argollas de las cuales penden una carpa desvencijada con los colores del arco iris.Eso sí, bien encerada a fin de que no entren los baldes de agua que le arrojarán los aguaceros y las tempestades. Y alrededor clavan unas estacas hacia donde la tiemplan con unas soguillas.Después hacen rodar unas alfombras de colores exóticos que desenrollan y extienden sobre la tierra humedecida y sobre las hierbas del descampado.Y de cómo la gitana más vieja alza su blusa desvaída y le da de mamar con sus senos escuálidos y fláccidos a un hijo ya grande que lo suelta para corretear a una gallina desprevenida que huye volando hacia un muro.7. Una gataenjauladaPero otras gitanas más jóvenes ya han salido por las calles de la Alameda, por las calles del comercio y a la Plaza de Armas con sus pañuelos multicolores y sus barajas en sus manos agitadas.– ¡Oiga señor, señora, señorita! ¡Extiéndeme tu mano, que voy a adivinarte la suerte!Y aunque parezca mentira todos quieren que se les revele el destino, el mismo que escuchan con ojos maravillados entre el estupor y la gracia de cómo les ha de ir en el amor, los negocios o en sus pasos de cada día.Ahí es cuando la más linda con su falda floreada que le cae desde su cintura de aguja hasta la punta de sus pies de nubes, desnudos sobre las piedras heladas, pálida como la nieve y de ojos verde marinos, te coge sin ambages la mano diciendo:– La línea de la vida dice que vas a ser muy afortunadoY sientes que tu sangre se agolpa al percibir sus dedos de alabastro, pero tienes que confesarle antes que sea demasiado tarde:– ¡Voy a ser afortunado, pero por ahora no tengo nada de dinero!Entonces te da un pellizco con la agresividad de una gata enjaulada.8. Aúnsiendo asíA todo lo anterior se suma algo verdaderamente grandioso. ¡Y es la llegada del circo!, cuyos integrantes desde las afueras del pueblo hacen su ingreso con sus vestidos chillones, subidos en unos zancos que sobrepasan la altura de los techos.Avanzan haciendo alharaca, aspavientos y asustando a los más chiquitos que en vez de salir a verlos entran despavoridos a sus casas y desaparecen en los cuartos, escondiéndose miedosos y llorando bajo las camas, de haber visto gigantones estrafalarios tan altos y empinados como las cumbreras de los techos.Este circo, en vez de leones o elefantes, trae como sus figuras estelares: Una cabra negra que salta. Un perro chusco que ladra. Un pavo que se encrespa.Y que, curiosamente, pese a que con esos animales lidiamos todos los días nos entusiasman hasta perder el sentido cuando los aplaudimos en el escenario alzado a las afueras del pueblo.Pero aun siendo así, resulta extraordinario porque la cabra salta por un aro de fuego. El perro se para de cabeza. Y el pavo se da de volantines, lo que nos hace desternillarnos de risa.9. Cogidaspor los bordesYa en la función, el hombre que vende las entradas es el mismo que toca en la orquesta. Y es el mismo que camina por la cuerda en el escenario.¡Pero lo que más nos conmueve a los niños es que la señora que se balancea en el trapecio esté casi desnuda en tanto frío serrano! Y es por esta proeza y no por otra por la cual la aplaudimos a rabiar.Pero además, porque es la mamá de lo que brilla y fulgura en todos los circos del mundo: una niña linda como un sueño que se columpia en el trapecio, saltando de una cuerda a la otra cuerda en el aire y que danza haciendo que nuestros corazones se agiten, salten y estallen.Y a que llegue a cogerse de los trapecios más por el aliento que le alcanzan nuestros hondos suspiros.Haciendo ahora la cuenta, ese circo en realidad no era sino una sola familia, con sus animales domésticos. Y una carpa que debió ser sólo un poquito más grande que un conjunto de sábanas o frazadas cogidas por los bordes.10. Preguntarlea la tierraPero como todo lo que ocurre en el reino de la infancia, es para nosotros lo más grande y magnífico que pueda haber existir sobre la faz de la tierra.Y sus proezas tratamos de imitarlas durante todo el año hasta su nuevo regreso.La fiesta de mi pueblo así ha comenzado. A la cual muchos regresan desde lejos por la fuerza de la nostalgia y los sueños.En donde las personas se alegran sin saber por qué ni de qué, quizá solo de estar vivos. Y se extasían en lo que fue y también en lo que no fue. Pero que aquí lo miran en esos retazos de cielo que vislumbra al borde de los aleros.A la cual volver siempre es una manera de preguntarle a la tierra por lo que somos. Y una manera de exorcizar la muerte.La fiesta de mi tierra tan llena de misterios, como de retazos de clarines que nos llegan por lo alto de los muros donde crecen las malvas, las clavelinas y las enredaderas.Y las tejas extasiadas que siempre esperan para esta fecha nuestro regreso.Texto que puede ser reproducidocitando autor y fuenteTeléfonos: 420-3343 y 420-3860Obras de Danilo Sánchez Lihón las puede solicitar a:Editorial San Marcos: ventas@editorialsanmarcos.comEditorial Bruño, Perú: ventas@brunoeditorial.com.peInstituto del Libro y la Lectura: inlecperu@hotmail.comEdiciones Altazor: edicionesaltazo@yahoo.esSi no desea seguir recibiendo estos envíosle solicitamos, por favor, hacérnoslo saber