No me encuentro entre aquellos que creen que el reciente fallo de la Corte Internacional de Justicia nos da motivos para celebrar. A lo mucho ha servido para que Perú y Chile cierren el capítulo de las disputas limítrofes en cuanto al mar se refiere, pero en lo sustantivo no ha beneficiado en absoluto al Perú.
Se dice, por ejemplo, que Perú ha recuperado 50.000 km² de mar. No es tan exacto. En cualquier escenario se daba por descontado que, sea cual sea el veredicto, los 28.356 km² del triángulo exterior iban a ser otorgados al Perú por la sencilla razón que, de no ser así, la Corte Internacional iba a ir en contra de la Convención del Mar, lo cual era impensable. A tal punto esto es una realidad que el único juez que votó en contra de esta asignación del triángulo exterior marítimo al Perú fue el juez ad-hoc chileno Francisco Orrego Vicuña, nombrado específicamente por la cancillería vecina para este diferendo. La Corte Internacional recalca que sobre este triángulo Perú tiene derechos económicos mas no soberanía, según los estatutos de la Convención del Mar, razón por la cual Chile indica que ellos seguirán navegando por estos mares pues así lo señala el derecho marítimo internacional. Por lo tanto se miente cuando dicen que hemos ganado territorio en alta mar.
Por otro lado el Perú ha perdido definitivamente el mar que bañaba las costas de Tacna. Con todo derecho hay indignación en la tierra heroica. Una vez más Tacna sufre las consecuencias de una nueva mutación. Nuestra solidaridad con ellos. Pero no sólo de pérdida de soberanía marítima se trata. Chile pretende el triángulo terrestre de poco más de 37,000 mt² ubicado entre el Hito No. 1 y el Punto Concordia. Eso es inaceptable constituyendo una maniobra política que busca por objetivo dilatar el proceso de implementación del fallo. En ese sentido lo más lamentable es la falta de firmeza del presidente Humala que, cuando candidato, amenazaba con hacer marchas en esa zona. En estos días, en discurso oficial, dice que se encuentra “satisfecho con el fallo”.
Al Perú se le otorga un espacio marítimo a partir de la milla 80 que es el paralelo desde el Hito No.1. La posición peruana siempre fue desde el Punto de la Concordia. No se nos dio la razón. En el Perú algunos se alegran que se haya obtenido casi 22.000 km² a partir de la milla 80. No dicen que la riqueza pesquera está dentro de las 40 primeras millas de allí que tanto empresarios como clase política chilena digan que mantienen intactas sus operaciones pesqueras y tienen la razón. El 100% de la pesca chilena en esa zona se hace en las 30 primeras millas y ellos se han asegurado hasta la 80. En el Perú la Sociedad Nacional de Pesquería ha señalado que en el área obtenida, y que tanto celebran algunos, sólo se podrá pescar 5.000 toneladas nuevas a las que ya se vienen capturando. Me pregunto ¿eso es motivo para celebrar? Chile mantiene intacta su hegemonía pesquera en la zona.
Basadre señalaba con precisión el penoso papel de la clase dirigente peruana que ve con naturalidad la pérdida de soberanía. La situación sigue igual. Sean comentarios por encargo o de personas que ignoran la historia del Perú, se pretende decir que el reciente fallo de La Haya es totalmente beneficioso para el país. Se dice que en Chile el propio presidente Piñera se lamenta de los resultados. No me extraña. En Chile saben hacer política, no silenciaron a su clase dirigente durante el proceso, calculan el efecto de sus declaraciones y no claudicaron de su derecho al cabildeo. Allí están los resultados. Si en Chile se lamentan es porque saben que la celebración es enemiga del statu quo comercial y tienen que aparentar pesar para que sus intereses comerciales en el Perú no se vayan a afectar. Eso es hacer política, una palabra que en el Perú cada vez está más devaluada.
No aprendemos de la Historia porque la ignoramos con entusiasmo. Pretendemos decir que hay soberanía en el mar de Grau cuando en la práctica no existe. Se promulga una ley pesquera para preservar los recursos marítimos a cargo de empresas peruanas y lo primero que hacen estas empresas es vender sus activos, y las licencias de pesca por supuesto, a voraces capitalistas chinos. A este ritmo el “mar de Grau” será explotado por extranjeros perdiendo la oportunidad de hacer de nuestros recursos estratégicos una ventaja competitiva. No tenemos clase dirigente y mucho menos élites, recordando nuevamente a Basadre. En ese sentido el espectáculo de la portátil nacionalista en Palacio de Gobierno o del abanderamiento aprista celebrando el fallo es brutalmente anecdótico.
No hay nada que celebrar. Es mi punto de vista. Sólo queda cumplir el fallo. La historia será la que señale el papel que en estos días cumplieron gobernantes, políticos, empresarios y medios de comunicación. De ese veredicto no se escaparán.
¡UNIDAD PARA LUCHAR,UNIDAD PARA VENCER!
Estimados maestros y maestras:
Estamos atravesando circunstancias difíciles para el magisterio y la educación pública. El mensaje presidencial por fiestas patrias ha hecho más evidente el abandono, por parte de Ollanta, de sus compromisos electorales y la continuidad del modelo neoliberal.
Lejos de cumplir con lo ofrecido al magisterio y lo avanzado en la mesa de diálogo, respecto del urgente incremento de remuneraciones y pensiones, así como el pago de la deuda histórica, lo que tenemos es una propuesta de una "Ley de Desarrollo Docente" que, por presión de los defensores de la mal llamada Ley de CPM, hasta le han cambiado de nombre y, hasta donde se conoce por la versión no oficial que está circulando, en el marco del ahorro fiscal que exige el Ministerio de Economía, por orden del FMI, pretende anular los más importantes beneficios económicos y hasta rebajar los niveles alcanzados por los maestros comprendidos en la Ley 24029 – 25212.
Sin embargo, el SUTEP cuenta con el Anteproyecto de Ley del Profesorado, que luego de ser aprobado en dos convenciones nacionales sucesivas y de una amplia difusión, ha sido presentado al Congreso de la República por intermedio del Colegio de Profesores del Perú. Tal como lo ha aprobado la V Asamblea Nacional de Delegados del SUTEP, del 02 de agosto, exigimos el más amplio debate de ambas propuestas con la participación de los directamente involucrados como somos los maestros.
Entre otras cosas, debemos exigir:
1) Aumento para todos los maestros (desde el piso salarial) y proporcionalmente a los niveles. ¡No a la rebaja de los sueldos!
2) Respeto a los niveles alcanzados en las respectivas leyes (24029 y 29062) no a las "reubicaciones" arbitrarias y sin criterio pedagógico. ¡No a la rebaja de niveles!
3) Carrera de 5 niveles y desarrollo meritocrático (por evaluación) para los ascensos.
4) Evaluación que incida principalmente en el desempeño en el aula o la función que se ejerza.
5) Respeto a todas las bonificaciones y asignaciones conquistadas.
6) Respeto de la estabilidad laboral.
7) Desarrollo magisterial con equidad, no a la condena del 70% de maestros a una "carrera" de dos niveles (29062).
Lamentablemente en esta lucha tenemos dos distractivos: por un lado los defensores de la mal llamada Ley de CPM de Chang y García, que plantean no tocar ese engendro y "ni un sol de aumento si no es previa evaluación"; y, por otro lado el anarquismo divisionista que le hace el juego a los enemigos del magisterio y que tras el objetivo de legitimar al movadef de sendero luminoso, para buscar la amnistía de Fujimori, Montesinos y Abimael Guzmán, han promovido una huelga de una minoría del magisterio del sur del país, generando ante la opinión pública la imagen de un sindicato dividido, que sólo favorece a los implementadores de la reforma educativa neoliberal, privatista y antimagisterial. No es la primera vez que lo hacen: en el 2003, con su accionar divisionista, dieron motivo para la declaratoria del estado de emergencia y la posterior aprobación de la Ley General de Educación 28044 que da inicio a la "evaluación para la permanencia"; en el 2007, igualmente promovieron una huelga divisionista que permitió la dación de la Ley 29062 mal llamada de CPM de Chang.
Hoy requerimos de la más amplia unidad para enfrentar esta situación. Además del amplio debate para el que debemos estar preparados, en base a nuestra propuesta, necesitamos estar mentalizados para las más diversas acciones de masas que debemos implementar en el momento oportuno, sobre todo cuando se inicie el debate en el Congreso, incluida la huelga. Participemos activamente en las reuniones de estudio y debate de la Ley el 10 de agosto y garanticemos la presencia de nuestros delegados en la Convención Nacional Extraordinaria del 18 de agosto. Pongamos en tensión todas nuestras fuerzas.
Rene Ramírez Puerta
Secretario General SUTEP