PADRES E HIJOS
Así se forma un profesor en Finlandia
En España ha bastado durante años aprobar la Selectividad para acceder a los estudios de maestro de Primaria
La formación que reciben los profesores españoles se ha puesto en tela de juicio tras el informe de la inspección educativa sobre las respuestas y preguntas que han dado los opositores al Cuerpo de Maestros de la Comunidad de Madrid en el proceso de selección de 2011. Que solo el38% de los candidatos haya sabido situar Ávila y Pamplona en el mapa, o que el 93% no supo convertir dos kilos y 30 gramos en gramos, o que alguno haya escrito que la gallina es un mamífero... ha revelado un nivel de cultura general muy bajo en las personas que aspiran a enseñar a los niños de 6 a 12 años. Por no hablar del daño y desprestigio que han sufrido la profesión y los docentes ahora en activo.
Graves errores que dan pie a preguntarse cómo se forma un maestro en nuestro país, una formación que los propios docentes han pedido mejorar.
Hasta ahora para acceder a estos estudios no se ha exigido una nota alta en Selectividad. En muchas ocasiones, bastaba un cinco para empezar a estudiar Magisterio. Y para muchos, ese fácil acceso ha lastrado la formación de los profesores, sobre todo al mirar hacia Finlandia, el ejemplo en el que se fija gran parte de la comunidad educativa ya que sus alumnos acaparan los primeros puestos del informe PISA por su excelente nivel educativo.
Los finlandeses escogen sólo a los mejores alumnos para ser maestros, convencidos de que los mejores docentes deben situarse en los primeros años de la enseñanza. Hay que superar un proceso de selección muy exigente para acceder a los estudios universitarios para ser profesor.
Así lo describe Javier Melgarejo, licenciado en Psicología y doctor en Pedagogía, que ha realizado diversos estudios sobre el sistema educativo de Finlandia:sólo los estudiantes con mejores expedientes académicos y más elevadas calificaciones en la reválida (algo así como la Selectividad española) pueden plantearse ser profesores. «La nota media del Bachillerato y de la reválida deben superar el nueve sobre diez», explica Melgarejo.
Superar un examen nacional
Después se presentan a una prueba nacional para acceder a la carrera docente, donde también se tiene en cuenta si el aspirante lleva a cabo actividades de voluntariado, tiene experiencia profesional, otros estudios... «Suelen escoger al 10% de los candidatos que se presentan. Son los mejores, con aptitudes de sobresaliente, que han superado en el examen nacional a otros alumnos también muy buenos», afirma Luisa Gutiérrez, responsable de comunicación del Instituto Iberoamericano de Finlandia.
Ahora se pide hasta un nueve
En España, el único requisito para cursar el título de grado de Maestro de Educación Primaria es aprobar la Selectividad. Pero el nivel de exigencia está cambiando. Según un informe de Avanzaentucarrera.com, el portal de formación de Infoempleo, de los más de cien centros que en España impartieron este grado el pasado año, ya había cerca de un 80% que pedía en junio de 2012 una nota superior a seis. En concreto: 45 centros exigían un 6; 24 un 7 de media; 17 un 8 y cuatro centros un 9.
En Finlandia, el título de grado equivale a cinco años. Las prácticas se realizan desde el principio, en periodos más cortos durante los tres primeros años y más largos en los dos últimos. Al final, el aspirante realiza una tesina de fin de carrera. Si aprueba entra en el mercado de trabajo y será seleccionado por el director de algún colegio.
Prestigio social
Pero hay otra clave para el debate: «Los profesores en Finlandia cuentan con más prestigio social que un médico», dice Luisa Gutiérrez, algo de lo que adolecen los docentes españoles. «Son valorados y respetados por padres, alumnos, el director del colegio... Se confía en ellos. Y eso contribuye a que tengan mayor autonomía y altas dosis de motivación», asegura Gutiérrez. Las mismas claves que, en opinión del profesor Vílchez, podrían hacer mejorar el sistema educativo español: «El éxito de Finlandia en educación se debe a la mayor valoración y prestigio social de los maestros, a una buena selección y una formación que se cuida. Además, hay una unión de fuerzas de todas las administraciones. Y también están bien pagados y motivados».