Declaración de Las Rojas
El 1° de julio, los diputados de PLN, RC (renovación costarricense) y ML, aprobaron –garantizada por el quórum facilitado por diputadxs del PAC- la entrada de 46 buques militares junto con toda su artillería bélica y 7000 marines estadounidenses.
Dicha acción constituye un agravante del ya de-vastador Convenio de navegación conjunta de aguas, el cual implica la navegación de vehículos norte americanos y su intervención policial por aguas nacionales. El propósito del acuerdo en cuestión, según el gobierno de Chinchilla, es la lucha contra el narco tráfico, la ayuda internacio-nalista y acciones humanitarias. Pero ello significa en primera instancia el regreso de Estados Unidos a América Latina para mantener éstas y otras zo-nas bajo su control.
Por otro lado la ayuda del gobierno Norte Ameri-cano no parece ser "de gratis". A cambio de ello la Embajada Gringa solicitó libertad de movimiento de los militares dentro del territorio costarricense así como inmunidad ante crímenes comunes.
En una traducción no ofi-cial de la solicitud, realiza-da por la embajada esta-dounidense, se estipula como condición que "(…) El personal de los Estados Unidos en Costa Rica podrá disfrutar de libertad de movimiento y el derecho de realizar las actividades que considere necesarias en el desempeño de su misión…"(Departamento de servicios parlamentarios, Acta de la Sesión Plenaria N 39 1 Julio de 2010. p42).
Así mismo, los marines no solo tienen libertad de movimiento e inmunidad, sino que poseen el crite-rio para decidir cuáles serán y de qué forma se llevarán a cabo sus "misiones". (Artavia, V. (2010) Fuera tropas Yanquis de Costa Rica. Prensa Socialista N 102 (p 4-7) ). Irónicamente estos héroes del combate contra el narcotráfico resultan clientes frecuentes de los "dealers" doquiera que desembarcan; durante sus "ratos de esparcimiento" consumen grandes canti-dades de drogas y licor, y luego se dedican a co-meter "crímenes comunes" como violar y secues-trar mujeres o desplazar personas de sus lugares de residencia…
No es un secreto para nadie el carácter coloniza-dor que poseen las intervenciones del ejército nor-te americano; un ejemplo muy cercano a nuestro territorio ha sido el Plan Colombia que ha termina-do en el desplazamiento de miles de colombianxs, violaciones de mujeres y agresiones de todo tipo; de la misma forma se ha manifestado el ejército Yanqui con su intervención en Irak, entre otras.
La violencia hacia las mujeres se ha incrementado dando como resultado cifras alarmantes en Costa Rica y alrededor del mundo. La intervención e im-punidad con la que los gobiernos han recibido al ejército norte americano solo han incrementado la violencia y los abusos contra los derechos de las mujeres y la población en general.
Ante esta situación, Chinchilla de-muestra una vez más de qué lado está, al desinteresarse por la suerte de las mujeres trabajadoras que son las primeras víctimas del desplaza-miento y las violaciones; y obviando toda su ideología patrioterista identi-taria de falsa "paz": ejercito de profe-sores y demás "bla, bla, blas" que le siguen.
Desde Las Rojas hacemos un grito de repudio absoluto al permiso otorgado por la Asamblea Legislativa y al acuerdo anterior sobre navegación conjunta así como al consentimiento de Laura Chinchilla. Tam-bién hacemos un llamado a la organización y la lucha en las calles junto con todas las trabajado-ras y trabajadores a pronunciarse en contra de la colonización Yanqui y al ingreso de militares a te-rritorio costarricense o a cualquier otro. Le exigi-mos a Laura Chinchilla el cese del acuerdo de la militarización.
¡Alto a la intervención militar y los abusos contra las mujeres!
http://pst-cr.blogspot.com/2010/08/fuera-yanquis-de-america-latina-no-mas.html
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